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BROCHA DE AFEITAR SINTÉTICA SIMPSON TRAFALGAR T3
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Los ingredientes utilizados para elaborar nuestros productos proceden de la naturaleza.
Brocha de afeitar sintética Trafalgar T3 - Simpson. Una brocha de afeitar para el afeitado diario.
El escocés Alexander Simpson empezó a fabricar brochas de afeitar y accesorios de aseo para hombres en 1919 y es considerado un pionero en el sector. Al principio, la fabricación se realizaba en el East End londinense, pero más tarde se trasladó a Clapham. En 1941, tras la pérdida de su fábrica a causa del bombardeo de la Luftwaffe alemana en la Segunda Guerra Mundial, la producción se trasladó a West Country, al famoso molino de Nimmer. En la actualidad, las brochas de afeitar Simpson y sus productos asociados son fabricados por Progress Shaving Brush (Vulfix) Limited en la histórica Isla de Man. Se siguen fabricando de forma tradicional con nudos hechos a mano por trabajadores cualificados.El Trafalgar es la última incorporación a nuestra nueva gama Alexander Simpson East. 1919. Este asa torneada de bonito diseño y vistosidad está rellena de nuestra fibra sintética de calidad soberana de origen único.
Especificaciones aproximadas del Trafalgar T3 :
Altura total del cepillo - 100mm
Altura del asa - 50mm
Nodo - 50mm
Diámetro del nodo - 26mm
Consejo de uso y cuidado :
Al afeitarte, procura realizar movimientos de vaivén con la brocha para crear espuma en lugar de movimientos circulares de "aplastamiento", que tienden a ejercer más presión y tensión sobre las cerdas. Una fuerza excesiva puede romper o desprender las cerdas de su unión adhesiva. Nunca sumerjas el cepillo en agua a una temperatura superior a la que tu piel pueda tolerar.
Asegúrese de que el nudo de la brocha esté completamente limpio de TODOS los residuos de jabón o crema después del afeitado - utilice agua limpia y tibia y apriete suavemente la base del nudo para determinar si se han eliminado todos los residuos (esto evitará la formación de moho).
Sacude suavemente el cepillo y frota ligeramente las cerdas contra una toalla muy suave para eliminar el exceso de humedad del nudo.
Dejar reposar o colgar (cualquiera de las dos opciones está bien) en una zona bien ventilada, preferiblemente muy cerca de una ventana abierta. Un tiempo de secado insuficiente entre afeitados provocará un moho profundo en el nudo y una posible caída del cabello.
Intente alternar entre dos cepillos si es posible para permitir un periodo de secado de 48 horas.
Lava el cepillo con un producto capilar normal cada mes aproximadamente para mantenerlo limpio.
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Detalles
Para obtener los mejores resultados, recomendamos dos métodos de uso :
1 - En el tarro : Remoje la brocha de afeitar en agua tibia, escúrrala ligeramente y, a continuación, realice movimientos circulares en el tarro, aplicando una suave presión durante 30 a 60 segundos, dependiendo de la rigidez de las cerdas de su brocha de afeitar.
Una vez que se haya formado una pasta de jabón alrededor de las cerdas de la brocha de afeitar, trabájela hasta obtener espuma sobre el rostro, realizando círculos o movimientos de vaivén (como si pintara) sobre la zona a afeitar hasta obtener una espuma agradable. Puede añadir unas gotas de agua a las cerdas de la brocha en cualquier momento para obtener la consistencia adecuada para usted.
La dosis adecuada de agua consiste en lograr el equilibrio ideal entre una buena protección y un buen deslizamiento. Una espuma de afeitar espesa con menos agua proporcionará más protección, mientras que una espuma de afeitar fina con más agua ayudará a que la cuchilla de afeitar se deslice con más suavidad.
Aclare las zonas afeitadas con agua, preferiblemente fría, para asegurarse de que se eliminan los pelos sueltos y los restos de espuma.
Cuando haya terminado de afeitarse, enjuague bien la brocha de afeitar para eliminar toda la espuma y escúrrala lo mejor que pueda. Enjuague el exceso de espuma de la superficie del jabón y déjelo secar. Pasadas unas horas, puede cerrar la tapa y guardar el jabón en un lugar fresco y seco, alejado de la luz.
2 - En un cuenco de afeitado: Con el dedo, coja una cantidad de jabón de afeitar del tamaño de una almendra y presiónela en el fondo de un cuenco de afeitado. Sumerja la brocha de afeitar en agua templada, escúrrala ligeramente y trabaje la espuma en el cuenco en círculos hasta obtener una espuma de afeitar. Puede añadir unas gotas de agua a las cerdas de la brocha en cualquier momento para obtener la consistencia que más le convenga.
La dosis adecuada de agua consiste en lograr el equilibrio ideal entre una buena protección y un buen deslizamiento. Una espuma de afeitar espesa con menos agua proporcionará más protección, mientras que una espuma de afeitar fina con más agua ayudará a que la cuchilla de afeitar se deslice con más suavidad.
Aclare las zonas afeitadas con agua, preferiblemente fría, para asegurarse de que se eliminan los pelos sueltos y los restos de espuma.
Cuando haya terminado de afeitarse, enjuague bien la brocha de afeitar para eliminar toda la espuma y escúrrala lo mejor que pueda.